jueves, 14 de marzo de 2013

"LA MONTAÑA MÁGICA" de Thomas Mann



De esta novela se ha dicho que es una de las mejores de todos los tiempos y un clásico indiscutible de la literatura alemana aunque su autor no llegó a ganar el premio Nobel de literatura por ésta sino por Los Buddenbrook , en 1929 y a mi parecer bastante mejor.

Sinopsis: La acción se sitúa a inicios del siglo XX, en un balneario de tuberculosos situado en Davos Platz, en el Cantón de los Grisones (Suiza). Su protagonista, Hans Castorp, viaja desde Hamburgo hasta allí arriba para pasar tres semanas de vacaciones con un primo suyo que está allí ingresado. Pero, lo que en un principio suponía que iba a ser una estancia corta, se convierte en una estancia de siete años, debido a una hipotética complicación en su salud.
Por tanto Mann, lo que nos narra, son los siete años de paréntesis en la vida de este joven
Llegamos a sentir la monotonía del tiempo ya que nos cuenta casi día a día las repetitivas actividades que realiza allí incluyendo sus respectivas curas de reposo al aire libre, en sus terrazas y hamacas (de ahí la de la portada) y forrados con una manta; así como el hecho de tomarse la temperatura unas seis veces al día.
Somos testigo, además de las relaciones que va estableciendo con los distintos "habitantes" del lugar los cuales son de lo más variopinto y a cual más estrambótico, desde los que están ingresados, hasta los médicos que los atienden. A pesar de ello y gracias a estas relaciones, observamos en él una evolución existencial que es lo que realmente el autor quiere plasmar.

No voy a extenderme en la presentación de los personajes ya que son innumerables; os remito los que a mi parecer, han tenido más relevancia:
- Hans Castorp; protagonista. Se trata de un joven estudiante de ingeniería, burgués y de vida acomodada. Su estancia en este balneario le va a servir para madurar como persona y para valorar lo que es realmente importante.
- Joachim; primo de Hans y su inseparable compañero durante su estancia allí. Es igual de joven que Hans y lleva también una vida bastante acomodada aunque su verdadero sueño es alistarse en el ejército. Al final se  recupera y consigue alistarse dejando a Hans solo y con mucha pena. Aún así Joachim tendrá que regresar por una recaída en su salud y deberá abandonar el ejército. Considero que éste parece tener más los pies en la tierra que Hans.
- El italiano Settembrini; es el personaje más excéntrico y bohemio de la novela y podría decirse que casi el más importante. Es humanista, filósofo, pedagogo, escritor...al que le gusta hablar y filosofar con sus compañeros de "todo lo divino y lo humano". En Hans encontrará el compañero ideal al que tratar de hacer llegar sus ideas, ya que no suelen estar de acuerdo en la mayoría de ellas. Settembrini tratará hacer de Hans su pupilo. Una de sus conversaciones más recurrente es la relacionada con el concepto del Tiempo y cómo influye en nuestras vidas el paso del mismo. También considera a Petrarca como "el padre de los buenos tiempos"
Puede que en realidad sea el personaje más interesante pero para mí , su salida a escena en la novela hacía que la lectura me resultase de lo más pesada...Sus divagaciones llegan a ser extenuantes e inundan muchísimas páginas.
- Naphta; aparece a mitad de la novela y se convierte en amigo de Settembrini. Es otro "divagador" como él pero al final se convierte en su antagonista ya que no llegan a ponerse de acuerdo en nada, son de ideas completamente distintas llegando incluso a un trágico final: Se baten en un duelo a muerte.
- La rusa Clavdia Chauchat; amor platónico de Hans. No llega a mantener ningún tipo de relación con ella. Llega a resultar de los más absurdo e infantil las cosas que hace por cruzarse con ella o por cruzar cuatro palabras. Ella llega a absndonar el balneario durante un tiempo y regresa con su pareja.
Lo que no me ha gustado nada es que la única conversación que mantienen tanto ella como Hans más larga la hacen en francés, por lo menos ocupa unas tres o cuatro páginas y en esta edición no está traducida, así que me he quedado con las ganas de saber lo que se dicen porque desconozco el idioma. Desconozco si en otras ediciones está traducido.
- Los médicos: el doctor Behrens y el doctor Krokovsky a cual más extraño. Behrens digamos que es el coordinador y el otro su ayudante. Pasan consulta todos los días, en concreto Krokovsky lo hace a las cuatro menos cuarto después de las curas de reposo. Behrens, además actúa con ellos como una especie de psicólogo, citándolos normalmente en su despacho. Además es pintor y en una ocasión llega a retratar a Madame Chauchat.
- Peeperkorn; pareja de Clavdia, un anciano. Aparece hacia el final de la novela y lo curioso es que llega a mantener una buena relación con Hans.


El lector llega a sentir ese ambiente asfixiante y monótono que rodea a los personajes y que a la vez los envuelve ya que parece que no quieran salir de allí. Thomas Mann ha sabido recrear a la perfección ese microcosmos que se establece en ese balneario, parecen encontrarse en el limbo, olvidándose de todo lo que ocurre "abajo". Aunque al principio, Hans se muestra reacio a mantener una relación seria con estas personas, al final sucumbe y se convierte en uno más, queda encandilado y se sumerge en esa monotonía diaria a la que son sometidos ya que él mismo termina cayendo "enfermo". Esto mismo, por el contrario, no le ocurrirá a un tío suyo que acude a verlo, quzás por el grado de madurez que ya posee.



El final de la novela parece ser trágico pero a mi modo no lo es tanto ya que somos testigos de ese despertar del sueño en el que se ha visto inmerso durante siete años. Se da cuenta de lo que realmente importa debido a lo que está ocurriendo"abajo", el inicio de la Primera Guerra Mundial. Siente que tiene que ayudar a su país en estos momentos tan difíciles. Se alistará en el ejército y lo dejaremos en plena batalla "Adiós, Hans Castorp, ingenuo niño mimado por la vida".
El autor pretende dejarnos claro que es un chico afortunado en la vida pero que lo que realmente importa no es el final sino ese paréntesis de siete años que le han servido de evolución existencial.
Por tanto, "despierta de su hechizo un chico joven que se refugia en ese balneario para no hacer nada" (al más puro estilo "ni-ni").
En 'Intenciones del autor' ya nos lo dice; pretende contar la historia de un chico joven y simpático. Sus vivencias en ese lapso de tiempo merecen ser contadas.

Quisiera señalar también que este libro incluye también muchas novedades para la época, como: el fonógrafo, la fotografía, los RayosX, el psicoanálisis...De ahí que Thomas Mann fuese también recordado por el profundo análisis que hizo sobre el alma alemana y europea de la primera mitad del siglo XX. Ante todo, con esta obra trató de reflejar los debates políticos y filosóficos de la época.

Con respecto al título, me parece de lo más adecuado ya que el lugar donde se establece el balneario se convierte en un lugar mágico, apartado del mundo, creándose así un mundo aparte donde sólo tiene cabida la retrospección, el análisis y sobretodo el reposo. A pesar del intenso frío, el propio Behrens lo considera un lugar idílico para huír de los gases y los humos de allí "abajo".

Con respecto al autor; Thomas Mann (1875-1955) fue hijo de una acaudalada familia de comerciantes. Estudió en Munich, preparándose para periodista. Se casó y tuvo seis hijos pero centrándome en lo más destacable, al estallar la Primera Guerra Mundial, defendió el Nacionalismo, cosa de la que cambió de opinión tras la contienda, convirtiéndose en un defensor de la Democracia.
En 1929 le fue otorgado el Premio Nobel por su novela Los Buddenbrook y con el estallido de la Segunda Guerre Mundial se fue a vivir a Suiza donde murió.



Concluyo reconociendo que , apesar de que logré terminar sus 1048 pag. es un libro "duro" de leer y que no puede recomendarse así como así. En más de una ocasión estuve a punto de tirar la toalla, pero siempre surgía algún tipo de situación que hacía que me introdujese de nuevo en ese microcosmos; parece como si te atrapase, al igual que hace con Hans. Si no llegas a introducirte en este ambiente, resulta una novela infumable.
Es de las que inspira amor u odio. A mí la verdad es que ni una cosa ni la otra. Reconozco que es un "novelón" pero indudablemente me quedo con Los Buddenbrook
Desde luego que La montaña mágica no deja indiferente y si eres de los que te ha gustado, es de las que conviene releer.

"Un modesto joven se dirigía en pleno verano desde Hamburgo, su ciudad natal, a Davos Platz, en el Cantón de los Grisones. Iba allí a hacer una visita de tres semanas. Pero desde Hamburgo hasta aquellas alturas, el viaje es largo; demasiado largo, en verdad, con relación a la brevedad de la estancia proyectada".
  

28 comentarios:

  1. Hola, me ha gustado mucho tu reseña. Tengo este libro en casa desde hace muchos años y nunca me he animado a leerlo, quizás por lo extenso que es, aunque debería hacerlo porque desde luego es todo un clásico. Te sigo y me quedo por aquí curioseando tu blog, Un beso

    ResponderEliminar
  2. Gracias Pilar por interesarte. La verdad es que una vez terminado el libro me quedé muy satisfecha pero hay que reconocer que tiene momentos......Vamos, que tienes que tener ganas de leerlo. Es lo que me pasó porque había leído antes LOS BUDDENBROOK y me gustó un montón. Lo reseñaré también. BS

    ResponderEliminar
  3. Anónimo8/2/14, 4:56

    Justamente hoy acabo de terminar de leer la obra y vaya que si es dura de leer por momentos, pero a pesar de las grandes reflexiones que hace el autor sobre cosas casi efimeras, como cuando Hans estudia una enciclopedia de medicina y lee sobre las celulas,ahh! la verdad llego un momento que me aburrió, y me salté unas paginas, pero realmente me gustó la historia. Settembrini y su encanto/desagrado por momentos y la actitud de Clawdia como toda niña mimada, que al final se queda afuera de la historia, despues de la muerte de Pepperkorn ya no la volvi a ver, a menos que no me haya dado cuenta jajaj
    por lo demas, me gustó la obra y claro, no es apta para cualquiera.
    Saludos :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. q razon llevas!!!!! hay momentos en los q dan ganas d tirar la toalla...pero siempre surgia algo q m llamaba la atencion y m animaba a continuar.Reconozco q tb alguna pagina tuve q saltar.....Aun asi m alegro d haberla leido. Gracias Eliza por tu comentario

      Eliminar
  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  5. El día de ayer terminé de leer el libro. Sí es bastante extenso como comentas, y yo, como lector, se me hizo en ciertos pasajes un poco pesado.
    Hay tantas cosas insertas dentro de cada capítulo que luego, y por ciertos momentos, en lo personal, me llegué a sentir agobiado y desconcertado. Tenía que pensar no solamente en la historia central sobre Hans, sino también sobre aspectos de la cultura occidental. Desde los griegos; el pensamiento cristiano de la Edad Media con su escuela escolástica; las ligeras evocaciones que a mi parecer hacía Thomas Mann sobre la filosofía de Nietzsche; el propio concepto de Estado moderno; el amor idealizado en la figura de Clawdia Chauchaut; la búsqueda de la "libertad" interior; el concepto de "enfermedad" con todo filosófico como base del mejoramiento individual y colectivo; el humanismo aburguesado que nace en Hans bajo la influencia de Settembrini y que lo hace sensibilizarse por el dolor ajeno al visitar a los enfermos terminales alejándose de su figura como hombre destinado a convertirse en el "reconocido" "Ingeniero Civil".

    Me quedan dudas en algunos fragmentos, principalmente entre las discusiones entre Settembrini (humanista, pedagogo) y Naphta (escolástico). ¿Es una lucha entre la visión -llamémosla así- "moderna" y el mundo antiguo feudal? Con las ideas de Naphta, ¿el concepto de Estado a inicios del siglo XX tiene profundas raíces religiosas? ¿El suicidio de Naphta es un símbolo de lo que en su momento representó -o representa- la concepción cristiana del mundo que deja su lugar al humanismo burgués encarnado en Settembrini? ¿El hombre-humanista del siglo XX -en voz de Naphta- en verdad está solamente interesado en la obtención de riquezas y en la ampliación de su propia cultura sin importar todo lo demás? ¿Es cierto que desde el siglo X -ó siglo XI- ya se visualizaba que el nuevo "dios" del mundo sería el dinero?

    A fin de cuentas, me deja la impresión que a lo largo del libro existen dos mundos, dos ideologías que se ven enfrascadas (Settembrini versus Naphta) y buscan florecer, dejar huella en el joven Hans que es, a su vez, la representación del hombre occidental de inicios del siglo XX. Ningún bando logra una victoria definitiva en el llamado "héroe".


    Gran libro, voluminoso, para pensar y pensar y pensar.

    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. vaya comentario....aporta mucho a la reseña.Gracias por incluir aspectos que se me han podido pasar por alto.
      La verdad es que tanto Settembrini como Naphta son dos personajes clave en la novela pero llegan a cargar de tal manera quw me resultaban insoportables.Muchas gracias

      Eliminar
    2. Que gran análisis que sin duda comparto. Sin dudas no hay reflexión y esto es lo que el libro regala.

      Eliminar
  6. Me lo acabo de terminar y me ha gustado mucho. Es cierto que a veces hay conversaciones en las que te pierdes un poco, pero la vida de cada personaje, las descripciones de los paisajes... me han gustado mucho.
    En mi edición que es bastante antigua esa parte que dices de la declaración de amor viene con la traducción, es la edición con la traducción de Mario Verdaguer.

    ResponderEliminar
  7. sus disertaciones sobre la conciencia del tiempo son muy buenas se ocupa de gran maestría exponer este tipo de filosofía dura en forma de narrativa, pero donde me ha parecido sublime es cuando describe los sueños fantasías y recuerdos del protagonista, ahí se vuelve atemporal y fresco

    ResponderEliminar
  8. sus disertaciones sobre la conciencia del tiempo son muy buenas se ocupa de gran maestría exponer este tipo de filosofía dura en forma de narrativa, pero donde me ha parecido sublime es cuando describe los sueños fantasías y recuerdos del protagonista, ahí se vuelve atemporal y fresco

    ResponderEliminar
  9. Es uno de los mejores libros que pueda leer una persona, no comparto la idea de muchos de saltarse paginas del libro. para mi el que se salta las paginas no ha leído nada.

    ResponderEliminar
  10. Es sin duda un libro extraño. Extensisisísimo. Muy aburrido en algunas partes y que dudas a cada página de seguir leyendo. De repente con capítulos bien locos como en el que invocan a los espíritus. Pero es cierto que provoca lo mismo que le provocó el sanatorio a Hans Castorp hastío pero ganas de quedarse. Creo que si no lo lees no te pierdes de nada. Para mí no valió la pena la eternidad que lleva leerlo y no lo recomiendo. Pero habrá quien si le guste pues.

    ResponderEliminar
  11. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  12. Es la tercera vez que lo leo. Me encanta leer despacio cada conversación y descripción. Mann consigue relacionar toda la cultura de su época en un relato verosímil por largo que sea. Aparte de las controversias que me resultan muy entretenidas y que ilustran a la perfección las inquietudes del hombre de principios del XX, me fascina la sensualidad que llena las páginas del enamoramiento de Hans Castorp, que en los libros de anatomía, en las radiografías y el torpe retrato de su amada encuentra pretextos para referirse a ella, a sus interioridades envueltas por su maravillosa piel, etc.
    Ya digo. La anatomía no sólo no es aburrida sino que me pone la carne de gallina. En fin. Un disfrute.
    En una sola novela, la descripción de un mundo a punto de irse al garete. Nostálgico, triste...

    ResponderEliminar
  13. Que suerte haber encontrado este blog para expresar lo que me ha marcado La montaña magica! A mi tambien me ha encantado. La he leído durante el verano y la terminé hace poco. Reconozco que había pasajes que se me hacían pesadísimos, pero avanzaba sin procesar, porque me perdía. Me interesaba la trama, la psicología de los personajes, las descripciones de los paisajes, etc. He llorado como una desconsolada con la muerte de Joaquin. He reído con las salidas de Hans y su espontaneidad. En fin, reconozco que me ha marcado. Y como todos los clásicos, aunque pasen años y siglos de lo que leemos, la humanidad no ha cambiado lo más mínimo, a pesar de todos los adelantos científicos...

    ResponderEliminar
  14. Que suerte haber encontrado este blog para expresar lo que me ha marcado La montaña magica! A mi tambien me ha encantado. La he leído durante el verano y la terminé hace poco. Reconozco que había pasajes que se me hacían pesadísimos, pero avanzaba sin procesar, porque me perdía. Me interesaba la trama, la psicología de los personajes, las descripciones de los paisajes, etc. He llorado como una desconsolada con la muerte de Joaquin. He reído con las salidas de Hans y su espontaneidad. En fin, reconozco que me ha marcado. Y como todos los clásicos, aunque pasen años y siglos de lo que leemos, la humanidad no ha cambiado lo más mínimo, a pesar de todos los adelantos científicos...

    ResponderEliminar
  15. Que suerte haber encontrado este blog para expresar lo que me ha marcado La montaña magica! A mi tambien me ha encantado. La he leído durante el verano y la terminé hace poco. Reconozco que había pasajes que se me hacían pesadísimos, pero avanzaba sin procesar, porque me perdía. Me interesaba la trama, la psicología de los personajes, las descripciones de los paisajes, etc. He llorado como una desconsolada con la muerte de Joaquin. He reído con las salidas de Hans y su espontaneidad. En fin, reconozco que me ha marcado. Y como todos los clásicos, aunque pasen años y siglos de lo que leemos, la humanidad no ha cambiado lo más mínimo, a pesar de todos los adelantos científicos...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que razon....gracias por haberte entretenido en leer la reseña

      Eliminar
  16. Enhorabuena por estos comentarios que esclarecen aspectos de este gran libro. Es verdad que hay pasajes difíciles de seguir, como las discusiones entre Settembrini y Naphta, pero creo que la historia se sigue bien en general. Me gustaron muchos pasajes como los encuentros entre los enamorados, las descripciones de los paisajes, concretamente en "Nieve", o esa sensación de que no pasa el tiempo en el sanatorio y hay que acostumbrarse a no acostumbrarse. Un libro lleno de sensaciones y de gran simbolismo empezando por el título de una montaña que te hechiza hasta hacerte olvidar toda realidad.

    ResponderEliminar
  17. La mejor novela que he leído en mi vida y fueron muchas!! Las reflexiones filosóficas los diálogos las reflexiones de cada personaje sus vínculos el entorno..
    DA PARA MUCHAS DIMENSIONES DE ANÁLISIS .en algunos momentos me provocó angustia desesperación impotencia... Pero uno de los planteos que más me conocieron es las disquisiciones en torno a la salud la enfermedad en realidad el sanatorio cura enferma o mata?!!!

    ResponderEliminar
  18. Suscribo todo lo dicho (por 3 veces) por Edin. También a mi me ha dado el verano. Me ha divertido el contrapunto entre la piscina y los Alpes Suizos, entre la vida despreocupada de los niños en el agua y las profundas reflexiones....
    El perder y encontrar el hilo a disquisiciones teóricas brutales contemplando gentes que sólo piensan en ir de parranda me he hecho sentir un bicho raro, como para irme de sanatorio mental. Pero bueno, ya estoy recuperado.
    Ahora una lectura menor y ya respirare mejor. Vaya si ha conseguido Tomasito retenerme unos meses en su hospital. Hasta luego.

    ResponderEliminar
  19. Muy buena la sinopsis y comentarios. Leí el libro hace unos años con mucha expectativa, es una gran obra, pero tuve momentos en que me debatía entre seguir leyéndola o no, por todo lo que comentan. Las descripciones del lugar, sucesos, fisonomías, me sugirieron imágenes indelebles, como esa reposera del comienzo. Un saludo a todos y todas.

    ResponderEliminar
  20. Novela preciosa y que no te deja de principio a fin. No apta para idiotas. No cualquiera la puede leer como «el juego de los abalorios» de he ese o «trastorno» de bernhard.

    ResponderEliminar
  21. Novela preciosa y que no te deja de principio a fin. No apta para idiotas. No cualquiera la puede leer como «el juego de los abalorios» de he ese o «trastorno» de bernhard.

    ResponderEliminar
  22. Un libro apasionante sin duda, tarde cuatro meses y luego de dejar plazos de días o incluso semanas sin leerlo la lectura cuando tomaba lugar se volvia vital y apasionante. La forma en que Mann describe la atmósfera que rodea a Hans con toda esa extrañeza de ideas y sentires que se adueña del «nuestro joven heroe» me llevo a no pocas divagaciones. Ah, fue un alivio salir de esta maravillosa montaña mágica.

    ResponderEliminar
  23. Ha sido lo mejor que he leído en el año. Considero que es una novela muy bien trabajada, ambiciosa en una magnitud de sentidos y, también, sumamente entrañable. De lectura atenta, no es para pasar el rato, concuerdo en que tiene páginas difíciles (me la pasé haciendo viajes a Google para consultar muchas cosas y al final ha resultado de lo más provechoso, después de leerla uno cuenta con varios puntos más en cultura) pero indispensables también.
    Mi disertación favorita: la del tiempo, uno de los esqueletos temáticos de toda la obra.
    Se ha quedado en mi lista de favoritas. Definitivamente pienso releerla en unos años.
    Saludos, da gusto encontrar a más gente que haya gustado de la obra.

    ResponderEliminar